Tuve el gusto de trabajar en el diseño de la marca y la etiqueta para este jarabe de agave tan especial. La meta era clara pero complicada: encajar toda la tradición y el resplandor del agave en una simple etiqueta. Al final, creo que logramos algo que no solo se ve genial, sino que te hace sentir conectado con la rica historia y la esencia del agave.